Según un informe de Nikkei Asia, varios fabricantes de automóviles en Japón han anunciado planes para reducir la producción en más de un millón de vehículos para el año fiscal actual. Esto se debe a un aumento de las infecciones por Covid-19 en el sudeste asiático, que ha afectado el suministro de chips semiconductores de los principales proveedores de la región, incluidos los fabricantes de automóviles de Europa y Estados Unidos.
El 10 de septiembre, Toyota dijo que revisaría su pronóstico de producción global a nueve millones de unidades en lugar de los 9,3 millones de unidades anteriores. A corto plazo, esto hará que el número de vehículos producidos disminuya en alrededor de 70.000 unidades y 330.000 unidades (180.000 unidades en el extranjero y 150.000 unidades en Japón) para octubre, en comparación con el plan de producción de agosto.
Toyota agrega que la demanda actual sigue siendo muy fuerte, pero las perspectivas de producción para noviembre y más allá siguen sin estar claras. Como resultado, dice que el plan de producción para noviembre y los meses posteriores asume que se mantendrá el plan anterior.
Suzuki se ha visto bastante afectada por la escasez de chips, ya que está reduciendo la producción en 350.000 vehículos, que es el 10% del total producido durante su último año fiscal. Como resultado, las operaciones de la compañía en países como Japón, Tailandia y Hungría se suspenderán, mientras que se espera que India, uno de sus mercados más grandes, opere a solo alrededor del 40% de la capacidad normal este mes.
Mientras tanto, Nissan ya ha dicho que reducirá la producción en 250.000 vehículos, Honda espera que las ventas caigan en 150.000 vehículos como resultado de los recortes de producción en su final, mientras que Mazda, Mitsubishi y Subaru han anunciado sus propios recortes de producción, contribuyendo a una caída total. entre los fabricantes de automóviles japoneses de alrededor de 1,05 millones de vehículos.
Toyota dice que su recorte de producción se debe al cierre de una planta de STMicroelectronics en Malasia, que redujo significativamente el suministro de piezas de vehículos que utilizan semiconductores. Dado que las fábricas no operan tan rápido como se esperaba, STMicroelectronics dijo que tiene una acumulación de pedidos de 18 meses y está luchando por mantenerse al día con la demanda.
Otro productor de chips automotrices, Infineon Technologies, suspendió la producción en su planta de Melaka por un total de 20 días durante un bloqueo impuesto en junio. Otras empresas como Bosch y Continental de Alemania también tienen fábricas en el sudeste asiático.
El problema de la escasez de chips de semiconductores también ha afectado a los fabricantes de automóviles fuera de Japón, ya que General Motors suspendió las operaciones en la mitad de sus plantas durante una a cuatro semanas a partir del 6 de septiembre. Renault también cerró algunas plantas en España por hasta 60 días desde finales de agosto. , mientras que Volkswagen redujo aún más la producción en su planta principal de Wolfsburg.
